Las tecnologías acompañarán este verano a las marcas, mucho más que los medios de comunicación.
Los principales centros turísticos durante el verano en el país son receptores de las acciones con las que las marcas eligen llegar a sus clientes en ese momento ideal, cuando uno la pasa bien, las vacaciones son una oportunidad para experimentar vivencias personales que involucran muchos sentimientos, mucha atención afectiva. Son momentos que se viven, disfrutan y rememoran, por esos son tan importantes para la comunicación.
Impactar en un usuario en su momento más feliz no es tarea fácil porque toda la atención se la llevan sus experiencias personales pero si se logra también será más provechoso.
La recordación y el impacto serán mejores y más eficientes, las personas memorizan más los momentos lindos.
De esta manera el verano se convierte en el escenario perfecto y 2022 estrenará novedosas estrategias fundamentalmente apoyadas en tecnologías digitales.
La industria creció tanto a nivel procesamiento de información que una persona en simultáneo puede estar expuesta a una “publicidad” de muchas formas por medio de una estrategia omnicanal. Seguir la ruta de un individuo en un espacio tan difícil donde el eje está centrado en las familias, los amigos, el entretenimiento, para las marcas es complejo, es una ardua tarea de digital que deberá focalizar en muy pocos mensajes muy relevantes, muy personalizados en el aquí y ahora de cada uno, desde ir al teatro, a cenar, vivir recitales o una salida con amigos, la gente está en movimiento, la vieja geolocalización por sí sola quedó obsoleta.
Me viene a la mente la frase que dice "una marca no puede ser todo para todos, hay que apostar por ser algo único para alguien”, no puedo dejar de emparentarlo con esta realidad en la que gracias a la big data se vincula el movimiento, sentimientos, pensamientos y actitudes de los individuos, llegar ahí con un mensaje tiene que ver con generar branding real.