El proyecto global involucró: el rediseño del logo de la marca, de toda la línea de productos, la adecuación a la nueva imagen en todos los países donde la marca participa y el desarrollo de las incursiones en nuevos mercados, unificando así la imagen y línea estética para toda la región. En el marco de este proyecto, se implementaron distintas fusiones estratégicas tales como la unión con Mogul, que consistió en el lanzamiento de los nuevos Rocklets Mogul, que mezclan los Rocklets y los caramelos confitados Mogul. Al mismo tiempo, bajo el lema “Ponele color con Rocklets”, se presentó al mercado la línea de galletitas Rocklets para Argentina y Chile, convirtiéndose así en las primeras galletitas que combinan confites con chips de chocolate. Y, por último, el lanzamiento en Chile de Rocklets Mix, una combinación de Rocklets y frutos secos y Rocklets Max y Rocklets Bon O Bon.
El objetivo principal del rediseño, más allá del aggiornamiento, fue potenciar la idea del snackeo y el appetite appeal de Rocklets: una marca joven, cercana, tentadora, divertida y dinámica alineada a la personalidad de los jóvenes de hoy. Para transmitir esto, Cornicelli trabajó con el concepto de explosión de sabor, jugando con el diseño del logo y agregándole mucha chocolatosidad, potenciando el destaque de los colores de los confites en contraposición con el fondo para sus diferentes productos.
Además, el estudio desarrolló la una serie de gráficas que se colocaron en los lobbys de los cines de Argentina anclando la comunicación sobre la comodidad y practicidad de la marca para acompañar la experiencia de ver una película.
